Una tarta no muy dulce pero fresca y deliciosa, la recomiendo para reuniones de verano o primavera.
COMO PREPARARLA
Para hacer una tarta para de 4 a 6 personas
NECESITAMOS:
Un royo de masa quebrada para dulce
2 peras (grandes)
Una tarrina de queso Philadelphia
Un brick de nata para cocinar (unos 200 ml)
100 gramos de perlas de chocolate puro o con leche
3 cucharadas de azucar glass
SE PREPARA...
- Extendemos la masa quebrada en un molde redondo y con paredes para horno levantando los bordes de la masa, haciendo como un cuenco de tal manera que los bordes del molde nos sirvan de pared, poniendo un papel vegetal debajo o huntando el molde con mantequilla previamente para que no se pegue.
- Se mete al horno siguiendo las instrucciones de la masa (suelen ser horno precalentado a 180º y dejarla hasta que se dore un poco).
- Mientras se hornea la masa, mezclamos en un cuenco el queso Philadelphia con la nata. Cuando se quede una mezcla homogénea la mezclamos con el azucar glass y añadimos a la mezcla las gotas de chocolate, guardándonos un puñado para decorar más tarde, y mezclamos hasta que estas se repartan bien por toda la mezcla.
- Guardamos la mezcla anterior en la nevera y pelamos las peras y las cortamos en dos mitades cada una, descorazonamos cada mitad, las partimos en rodajas finas y las reservamos en la nevera.
- Cuando la masa se haya horneado debemos esperar a que quede a temperatura ambiente (podemos acelerar el proceso metiendola e el congelador).
- Sacamos la masa quebrada (base de nuestra tarta) del molde, con mucho cuidado de que no se nos rompa la ponemos en el plato en el que vamos a presentar la tarta y rellenamos la base con la mezcla de Philadelphia, nata y chocolate que hemos hecho antes.
- Cuando hemos extendido bien la mezcla ponemos las láminas de pera encima por toda la superficie de forma decorativa (como en la imagen).
- Por último decoramos esparciendo las gotas de chocolate que nos guardamos por encima para dar a la tarta un poco de color y contraste.
CONSERVACION:
Recomiendo conservarla de una manera hermética en la nevera, si no la guardamos hermética puede coger otros sabores. Se sirve fría.
¡MUCHO GUSTO!
